Así es Tu Nene de Berjusa - Tiritón de Berjusa.

A mediados de la década de los ochenta Berjusa sacó los que para mi, fueron y serán, los mejores muñecos bebé de la historia. Su nombre comercial era "tu nene" y se fabricó sexado. Se anunció como se ven en la imagen de arriba y se vendían desnudos con dos complementos, el pañal y un chupe del color de su sexo. 

Ambos géneros eran iguales, con la única diferencia de los genitales, que en el niño era muy logrado y daba un aspecto de realismo total para la época.  Uno de los muñecos realistas más logrados para mi gusto. Fabricado todo en vinilo suave, se podía bañar y eso era el no va más para niñas de mi edad. Un bebé de 48/50cm, al que le quedaba bien la ropita real de primera postura. Parecían casi estar temblando en las manos porque su suave vinilo y su peso de 1,300gr hacía que al manipularlos la sensación fuera muy diferente a otros muñecos. Y encima no eran muñecos excesivamente caros, tenían un precio comercial afín a lo que se vendía por entonces y cualquier familia media se lo podía permitir. Después de sacar el modelo de "tu nene" Berjusa comercializó el mismo modelo de muñecos sexados pero con un mecanismo a pilas que si lo metías en agua tiritaba considerablemente hasta que lo secabas. Estos modelos más modernos tenían el mismo nombre con la diferencia del adjetivo: "Tu nene Tiritón". 

Por entonces yo ya tenía otro bebé tipo realista de la misma marca "Minene", el mío era el mulato y hasta entonces era uno de los muñecos más realistas que yo había tenido y mira que fui una niña que disfrutó de muchísimos modelos. Pero cuando por Reyes llegaron aquella pareja de muñecos igualitos... ufff... pasaron a ser mi debilidad. Mi madre les hacía mucha ropa conjuntada y tuve un carro doble donde los paseaba. Recuerdo que bañarlos. y hasta meterme en verano en la piscina con ambos a la vez, era para mí lo más. 

Hace unos días vi uno en Wallapop que habían bajado de precio, lo cliqué por si volvía a bajar y así fue. Era un niño al que vendían ya con nombre: Eneko. 

Lo compré sin alargarlo más y para mí sorpresa la señora que lo vendía me habló por el chat. Eneko venía desde el País Vasco. Lo enviaba una señora de 73 años que me comentaba que era de su hija que cumplía en breve 45 años y que había jugado mucho ella y también sus nietas.  Así que me alegré mucho de que fuese un muñeco tan querido y jugado como fueron los míos.  Así que le dejaré su nombre ENEKO.

Llegó a casa el día 19 de febrero y dos días después lo he sacado de su caja, que llegó muy bien embalado y me he puesto a repasarlo con detenimiento para ver qué fallas traía y qué arreglos va a necesitar. 

Después de un repasito me ha alegrado ver que está muy bien conservado. No tiene marcas de boli , ni rotu. No tiene cortes, mordeduras, ni le falta ningún trozo al vinilo. Estos muñecos eran tan blanditos que muchas niñas los mordían. También se podían desgarrar con facilidad con algo punzante. No trae cortes en el pelo, ni calvas, aunque habrá que hidratar y calentar el pelo para volver a darle forma. 

Muy común en estos muñecos es que el mecanismo interior de los ojos durmientes se oxidase (más con el extra de la publicidad de poder bañarlos), porque la parte interior era de metal. Hoy en día muchos vienen ya de pasta. El oxido hace que se atasquen y no cierren y que el blanco se vea oxidado. Habrá que sacar ambos ojos y restaurarlos. El derecho está falto de pestañas en el centro. Así que habrá que ver cómo injertar ese espacio para no renunciar del todo a las pestañas originales que son de un tono muy peculiar.

Y aunque en restauración menos duele ser más. Estoy valorando el hacerle alguna que otra customización, como meter imán dentro de la cabeza para poder usar el chupete imantado.  Y aprovechando que el vinilo con los años ha aclarado y está  un poco amarillento, tras subirle un poco de tonalidad en color rosáceo,  igual me decanto por hacer algunos retoques y convertirlo en un reborn de nueva generación.

Ya iré mostrando los arreglos 😉.